¿Por qué son importantes las competencias clave y las capacidades básicas?
Toda persona tiene derecho a una educación, formación y aprendizaje permanente inclusivos y de calidad, que desarrollen las competencias clave y las capacidades básicas. Las competencias clave y las capacidades básicas son aquellas que toda persona necesita para su realización y desarrollo personales y para su empleabilidad, inclusión social y ciudadanía activa.
Sin embargo, según los resultados del Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA) de 2018, más de uno de cada cinco alumnos de la Unión Europea no tiene competencias suficientes en lectura, matemáticas o ciencias.
En 2018, el porcentaje de rendimiento insuficiente era del 21,7% en lectura, del 22,4% en matemáticas y del 21,6% en ciencias. Durante el período de 2009-2018, a escala de la UE, los resultados en ciencias y en lectura empeoraron, mientras que permanecieron estables en matemáticas.
¿Qué está haciendo la UE en este ámbito?
El Consejo Europeo ha adoptado una Recomendación actualizada sobre las competencias clave para el aprendizaje permanente. El enfoque de la Recomendación es promover el desarrollo de competencias clave y capacidades básicas, lo cual requiere:
- proporcionar una educación, formación y aprendizaje permanente de alta calidad para todos
- apoyar al personal docente en la aplicación de planteamientos de enseñanza y aprendizaje basados en las competencias
- fomentar una variedad de planteamientos y contextos de aprendizaje desde la perspectiva del aprendizaje permanente
- explorar distintos planteamientos para la evaluación y la validación de las competencias clave.
Para apoyar el desarrollo de competencias clave, en noviembre de 2019 la Comisión Europea organizó una conferencia sobre enfoques y entornos de aprendizaje en la educación escolar.
¿Cuáles son las próximas etapas?
Dentro del marco para la cooperación política europea en el ámbito de la educación y la formación (ET 2020), los Estados miembros de la UE han establecido el objetivo de que menos del 15% de los jóvenes de 15 años puedan clasificarse como alumnos con bajo rendimiento en capacidades básicas de aquí a 2020.
La Comisión ayuda a los Estados miembros a reforzar las capacidades básicas y las competencias clave de todos los ciudadanos facilitando el aprendizaje mutuo y el intercambio de las mejores prácticas.